Aplicaciones de titanio en la industria del automóvil

PATERNA, Spain - May 3, 2015 - PRLog -- Las características técnicas del titanio (material ligero, alta resistencia a la corrosión y dureza) lo convierten en una opción atractiva para muchas aplicaciones de automoción. A pesar de sus bondades, el uso del titanio no se ha generalizado en el sector del automóvil como en el aeroespacial, principalmente debido a los altos costes de mecanización que conlleva el titanio. Sin embargo, a medida que la tecnología mejora y los costes de mecanizar tanto el titanio en barras como las planchas de titanio disminuyen, a muchos fabricantes les empieza a compensar dar el salto del aluminio al titanio, por su mejor rendimiento y beneficios a largo plazo.

En la industria automotriz actual, el titanio se encuentra más principalmente en los coches de carreras o vehículos deportivos, normalmente asociados a cortas producciones y una fabricación menos automatizada. En estos vehículos se busca obtener un mayor rendimiento por encima de otros factores, pues los usuarios a los que van dirigidos están dispuestos a pagar más por ello. El mercado de consumo, por otro lado, es más sensible al aumento de costes, por lo que los fabricantes tienen que sopesar la fabricación de piezas de titanio en función de los beneficios aportados respecto a otros materiales como el acero al carbono, acero inoxidable o aluminio. Otros factores a incluir en la ecuación y a tener en cuenta por los fabricantes son las diferentes normativas –límites de emisiones contaminantes, de seguridad–, pero más allá de estas, lo que más limita el uso de nuevos (y más caros) materiales como la plancha de titanio es el factor económico, sobre todo para las marcas mayoristas, interesadas en un producto con una buen relación calidad/precio.

Hasta hace poco, la fabricación de piezas de decoletaje a partir de barras de titanio no era una opción para los fabricantes mayoristas de automóviles. Actualmente los costes del mecanizado del titanio han disminuido, sacando a la superficie los rendimientos superiores del titanio respecto a otros materiales, a pesar de que sus costes siguen por encima del aluminio e incluso el acero inoxidable.

El uso de componentes de titanio en un vehículo mejora la resistencia a la corrosión, disminuye el peso y aumenta el espacio interior, lo que además conduce a un mayor ahorro de combustible y una mayor duración de los motores, al trabajar en un rango más bajo de revoluciones y con menos carga. Actualmente, el uso del titanio está creciendo tanto en los vehículos de competición como en el mercado de los coches de calle. Entre las piezas donde el titanio se está potenciando se encuentra partes de los motores -bielas, válvulas y retenes de válvulas, resortes y pernos de unión-. También es posible encontrar árboles de levas y balancines fabricados en titanio. Todos estos componentes tienen varias características en común; requieren de gran durabilidad, resistencia al calor y la corrosión.

En los últimos años se está produciendo un cambio importante, con el aumento del titanio en la industria automotriz, ya que los fabricantes están encontrando nuevas y rentables formas para aprovechar componentes de titanio. En este momento, donde más está creciendo el uso del titanio es en los sistema de escape, pues se consigue una reducción importante del peso del vehículo (lo que conlleva una disminución de los consumos), reduce las vibraciones y aumenta el ciclo de vida.

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